Del júbilo por ser el segundo indígena que ocupa tan alto cargo solo después de Benito Juárez se pasó a la polémica por encubrir el caso de acoso sexual de funcionarios del INPI a mujeres indígenas
También se pasó de la denuncia hasta el reclamo por cambiar la lucha social para convertirse en el operador del Estado para imponer megaproyectos de AMLO y por “burocratizar el despojo” con asambleas fast track
Pedro Matías
OAXACA, Oax. (quepasapedro).- La noticia de que el mixteco Hugo Aguilar Ortiz fue electo como ministro y que podría convertirse en el próximo presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) pasó del júbilo a la polémica y de la denuncia hasta el reclamo.
“Ya nos toca a los pueblos indígenas ocupar un espacio importante en las instancias de toma de decisión de este país”, fue el lema de campaña de Hugo Aguilar Ortiz y ahora convertirse en un ministro indígena en la Suprema Corte de Justicia de la Nación fue un logró que no sucedía desde la época del zapoteco Benito Juárez García.
¿Hugo Aguilar Ortiz, es el nuevo Benito Juárez?, esta interrogante generó júbilo entre la clase política de la Cuarta Transformación y fue alentada por el propio gobernador Salomón Jara Cruz al destacar la alta participación de Oaxaca en elecciones del Poder Judicial que fue del 15%.
Al tiempo que se congratuló de que el oaxaqueño Hugo Aguilar Ortiz encabece la votación, hasta este momento, en la elección de personas ministras de la Suprema Corte de Justicia de la Nación porque “es una persona que ha trabajado mucho y tiene un gran compromiso con los pueblos originarios; él viene desde abajo, nunca ha sido un funcionario de élite, y si resulta electo, Oaxaca se pone en alto”.
El júbilo se reflejó en las redes sociales donde se llegó a decir que Hugo Aguilar es el nuevo Benito Juárez, lo que desató la polémica porque Joaquín Galván sostiene que, si bien es cierto que el abogado mixteco es “brillante”, la mayor parte de su vida ha operado para el estado, sobre todo, en la imposición de los megaproyectos como el Tren Maya y el Corredor Interoceánico.
Esta postura fue secundada por Mario Quintero de la Asamblea de los Pueblos Indígenas del Istmo en Defensa de la Tierra y el Territorio (APIIDTT), quien señaló a Hugo Aguilar burocratizar el despojo con consultas fast track que nunca fueron libres, previas e informadas sino mas bien se impusieron con el consentimiento forzado de las autoridades.
Mientras que Miguel Ángel Aguirre, coordinador regional del Comité Nacional para la Defensa y Conservación de los Chimalapas, afirmó que Hugo Aguilar tiene una deuda moral y política con las comunidades indígenas y la bioregión de los Chimalapas y que ahora con el cargo que va a ostentar haga cumplir la sentencia que se ganó en noviembre de 2021 en todos sus términos.
Aunado a ello se le relacionó con el tema de violencia de género y que Joaquín Galván posteo: “@quinomixe Cuando mi compañera Sandra Domínguez denunció a funcionarios del INPI por su participación en chats de acoso sexual contra mujeres indígenas, el equipo jurídico del INPI encabezado por Hugo Aguilar envió a uno de sus abogados a ofrecerle un cheque abierto a cambio de su silencio.
Esta situación se hizo a través del abogado miembro del equipo Cristian Mahatma. Mi amiga Sandra me lo reportó inmediatamente, les dijo que no quería mas que la destitución de Rolando Vázquez Pérez, jefe de plazas del INPI”.
Sin bien es cierto que como activista Hugo Aguilar defendió los derechos de las comunidades indígenas en la organización Servicios del Pueblo Mixe y participó en la elaboración de la Ley de Derechos de los Pueblos y Comunidades Indígenas y Afromexicanas del Estado de Oaxaca, publicada en 1996, que a la fecha reconoce que de los 570 municipios que conforman la entidad, 417 se rigen por los sistemas normativos indígenas y 153 por el régimen de partidos políticos.
En su pagina, Hugo Aguilar Ortiz resalta que nació en 1973, en el corazón del territorio mixteco del estado de Oaxaca, en la comunidad de San Agustín Tlacotepec.
Resalta que en su adolescencia y juventud adquirió mayor consciencia de su identidad como mixteco, pero, también vivió la exclusión e injusticias asociadas a ellas. En este contexto decidió estudiar la licenciatura en Derecho en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca. Ahí, también, realicé estudios de Maestría en Derecho Constitucional.
“Con este ideal de justicia asesoré y defendí a personas y comunidades. Como parte de la sociedad civil contribuí en la construcción de la democracia en México y en la búsqueda de mejores condiciones de justicia y bienestar para todos”.
Mencionó que ha colaborado con instancias estatales, nacionales e internacionales: como consultor de la oficina del Alto Comisionado sobre los Derechos Humanos en México; Subsecretario de Derechos Indígenas de Oaxaca (2011 a 2016); en la Dirección de Sistemas Normativos del Instituto Electoral de Oaxaca (2016 a 2018) y, desde 2018, como Coordinador de Derechos Indígenas del INPI desde donde trabajamos para lograr la reforma al artículo 2° Constitucional sobre Derechos de los pueblos Indígenas y Afro mexicanos.
“Puedo señalar que hemos logrado una base Constitucional para construir un nuevo modelo de justicia, basado en derechos y principios que atienden la realidad, la identidad, la perspectiva de género, el respeto a la naturaleza y el sentido humano que deben tener las resoluciones judiciales”.
“Estoy preparado para trabajar por una justicia real, verdadera y con perspectiva pluricultural, en beneficio de todas y todos, en beneficio de los pueblos y las comunidades. Esa ha sido mi guía, compromiso y lucha, y no me desviaré de ella”, puntualiza en su mensaje.
Joaquín Galván sostiene: como abogado soy fan de Hugo, él es una persona brillantísima por eso ha logrado escalar en los movimientos indígenas del sureste y con esa formación dentro del activismo indígena construyó un nombre y una carrera.
En sus inicios “nos vimos representados en Adelfo Regino y Hugo. Esa dualidad Hugo-Adelfo está en todo el camino que han hecho con las comunidades indígenas, pero la segunda etapa de su vida con la llegada de Gabino Cué, genera esa ruptura con la base social de los 90s y el movimiento zapatista.
Esta ruptura con la base social inició cuando entra como funcionario y operan apoyando los intereses del Estado y confrontando a los movimientos indígenas.
Y de cierto perfil bajo, de manejo moderado dentro de las estructuras del estado, ya con Andrés Manuel López Obrador finalmente se proyecta como subdirector del Instituto Nacional de Pueblos Indígenas.
“Aquí es el punto medular porque estuvo en dos momentos claves de las estrategias o políticas de la 4T imponiendo megaproyectos y consultas a modo. En este caso, Hugo fue el cerebro de las consultas del tren maya y del interoceánico que estuvieronmarcadas por las denuncias de despojos violentos y Hugo solo estaba sirviendo para legitimar el proceso de despojo para pueblos indígenas a través del INPI mas allá que de las mismas comunidades”.
Y respecto al escándalo institucional del Chat Sierra XXX donde exhibían a mujeres indígenas que involucra a Salomón Jara y a Adelfo Regino por proteger a los involucrados, recordó que su amiga Sandra Domínguez (hoy asesinada) exhibió ese caso, en lugar de tomar decisiones de sanciones, la llamaron para entregarle un cheque en blanco como un tipo de reparación y Sandra mantuvo su postura y finalmente el INPI orillado por las denuncias termino por destituir a Rolando Vásquez Pérez.
En su cuenta de X posteó: @quinomixe Cuando mi compañera Sandra Domínguez denunció a funcionarios del INPI por su participación en chats de acoso sexual contra mujeres indígenas, el equipo jurídico del INPI encabezado por Hugo Aguilar envió a uno de sus abogados a ofrecerle un cheque abierto a cambio de su silencio.
Esta situación se hizo a través del abogado miembro del equipo Cristian Mahatma. Mi amiga Sandra me lo reportó inmediatamente, les dijo que no quería mas que la destitución de Rolando Vázquez Pérez, jefe de plazas del INPI”.
“@quinomixe Se acuerdan cuando Alejandro Solalinde me marcó para que eliminara tuits críticos contra la 4 T a cambio de su respaldo? Pues ni por eso vendo mi conciencia, si Adelfo y Hugo andan mandando amigos cercanos para que le baje, no lo voy a hacer, y antes me tienen que ver muerto”.
“Cuando su celebración por la elección de Hugo Aguilar como ministro de la corte supere al romántico “indígena mixteco” que salió adelante y se le vea como un sujeto político con un montón de cosas cuestionables en la función pública que ejerció a lado de Adelfo Regino me avisan”.
“Ojalá que Hugo Aguilar redireccione su camino Y NO SEA OTRO BENITO JUAREZ y logre desapegarse del umbral de Adelfo Regino. A Hugo, lo quiero mucho como abogado, es brillante y no por ello ético siempre, pero siempre consideré su talón de Aquiles, la lealtad ciega a Adelfo Regino (sic)”.
“Y si, los proyectos neoliberales de despojo como el Tren maya y el Interoceanico no se explican sin la legitimación neoliberal del INPI a cargo de Adelfo Regino y Hugo Aguilar Ortiz, a través de consultas cuestionables. Por ellas hay defensores de la tierra detenidxs federalmente (sic)”, puntualizó.
“Ahora el nuevo Benito Juárez no nos deben insultar la inteligencia, es brillante abogado, con momentos y no por ser indígenas y romantizar a Benito va a actuar así porque Hugo lleva años representando a los intereses del Estado Mexicano. Esperemos que por primera vez logre actuar por sí mismo y a tener autonomía”.
Mario Quintero de la APIIDTT recordó que “el papel que jugo Hugo lo conocemos por el caso de Mareña Renovable (empresa eólica que pretendió instalarse en la Barra de Santa Teresa en el Istmo de Tehuantepec) ayudó a interponer recursos legales, pero fue una sorpresa cuando engrosa al INPI y realiza una serie de consultas fast track, sí vimos rostros de disgusto al burocratizar el despojo.
Las consultas, dijo, “nunca fueron libres ni informadas solo buscaban el consentimiento forzado de autoridades y acarreados por el poder en turno”.
Y “ahora que nos enteramos en estas cuestionables elecciones nos preocupa la forma en que se realizaron las elecciones y la participación, pero ahora no sabemos de que lado va a ponerse Hugo porque a nosotros ya nos demostró que esta del lado oficialista de los megaproyectos, y en ese papel que va asumir ¿va a ser imparcial de los casos de despojo”, se preguntó.
Considera que sí es un logro que haya en la Suprema Corte personas indígenas, es un gran avance, el problema no quiere decir que por ser indígena o defensores vayan a mantener sus convicciones y los ideales.
Hugo validó estos procesos de consulta ilegítimos, fue un golpe político porque lo considerábamos un aliado, pero fue muy evidente el cambio de personalidad y trato a las comunidades, y sobre todo a los que fuimos cercanos. Ahora el tiempo nos va a decir si va a ser imparcial o va a seguir dando favoritismos al gobierno federal o peor aun a empresas privadas y a la narcopolítica vigente en el país. No es lo mismo tener cargos menores que estar en puestos de tomas de decisiones”, finalizó.
Por su parte, Miguel Ángel Aguirre dijo que Como Comité de Defensa de los Chimalapas esperamos que Hugo como ministro y como presidente cumpla ya esta sentencia con todos sus términos para que se reivindique con los pueblos zoques de los Chimalapas. Tiene esa deuda moral e histórica.
Recordó que Hugo hizo una controversia y la fundamento muy bien, pero para defender el hueso y por presiones de su compadre Adelfo Regino dejaron que los hermanos Víctor Hugo Alejo y Ángel Alejo no hicieran nada e hicieran todo para perder el territorio de los Chimalapas.
Recordó que Hugo formó parte del equipo multidisdiciplinario que elaboramos la controversia constitucional original que se sometió a la Suprema Corte de Justica en noviembre de 2012.
“Pese a todas las oposiciones logramos meter la controversia y Hugo Aguilar fue uno de los principales aportadores por sus conocimientos sobre derecho indígena y constitucional, mientras nosotros aportamos los datos históricos. Se sometió y se gano después de 9 años, sin embargo, se gano en noviembre de 2021 y en marzo de 2022 se publico al diario de la federación, pero no se ha cumplido ni el 25 % de lo que dice la sentencia.
Average Rating